La Economía Colaborativa, que se basa en compartir, genera abundancia, es más eficiente, permite hacer más con menos, se alimenta de nuevas fuentes de confianza y se ha vuelto en el nuevo modelo de producción ciudadana.

Y es que nos podemos organizar de otra manera, es decir, nos hemos dado cuenta que existe otra manera de compartir, de utilizar lo que está infrautilizado o lo que no utilizamos.

Este nuevo modelo de producción, el modelo de producción ciudadano, que produce abundancia, abundancia absoluta de lo intangible (Wikipedia) y abundancia relativa en lo material (transporte, estadía, etc…) rompe la lógica de escasez tradicional, donde solo existe lo público y lo privado. Cuando hace falta algo lo publico dice: le pido a los que tienen mucho y se los daré a los que tienen poco; Mientras lo privado, es decir, el mercado dice: Cuando hay poco de algo el que paga mas es el que pude obtenerlo, ambos enfoques son lógicas de la escasez.

Ahora tenemos un tercer modelo, que salta un orden de magnitud en la eficiencia.

De la economía que venimos la confianza estaba en las instituciones en un lado y en las empresas tradicionales en otro, que en ambos casos está muy menguada hoy por hoy, por lo que hemos generado nuevas fuentes de confianza, al fin y al cabo la confianza es el nuevo capital.

Lo que antes hacíamos a nivel de familia, de barrio de amigos ahora lo podemos hacer a nivel planetario y eso abre las puertas de un nuevo orden.

Y tenemos una segunda fuente de confianza, cuando definimos las reglas y las abrimos al público, y luego consensuamos si queremos cambiar dichas reglas.

El gran motor de esta nueva economía es la conectividad, pues nuestro nivel de conectividad determina el espacio, el número de relaciones nuevas que puedes establecer, las situaciones que puedes resolver, etc.…

Hay 2 tipos de negocios en este nuevo modelo de producción:

Servicios: Khan Academy, ZipCar, Netflix, Número Central (PBX virtual).

Plataformas: AirBnB, Android, Uber.

Estas empresas ponen a disposición del público productos/servicios infrautilizados, agregan capacidades disponibles, se asocian con otros para compartir un mercado, saben que si en vez de jugar la partida solo la juegan en sistema crecen exponencialmente.

Juegan de una manera diferente, se rediseñan para cada red, se piensan por completo, no juegan con sus propios recursos, juegan con recursos del sistema.

Cuando juegas al crecimiento exponencial hay una fase de decepción, porque el público no está acostumbrado, ni programado, a leer lo que viene muy rápido.  Por lo que debemos tener la mirada afilada a lo que viene, ya que en los primero años se verá muy raro, ej.: ¿Puedes tener un número de teléfono de oficina en el celular? ¿Puedes ganar dinero rentando una habitación de tu casa? ¿Puedes prestar tu carro a un desconocido y además manejarle? ¿Puedes tener un servicio PBX móvil sin instalación?

El futuro es prometedor.